viernes, 11 de marzo de 2011

El modo normal

Hace un tiempo que me preocupa algo. En realidad me inquieta mucho por no exagerar. Hay momentos que no me gusta estar en un estado “normal”, esto es como un estado neutral; el estado de un hombre feliz que tiene familia, amigos, que estudia o trabaja, que vive de una forma cotidiana y que de todas formas, de ningún modo pienso que esté del todo mal.

Pero siento que falta un complemento a este tipo de vida.

Y es que a veces prefiero evitar esa sensación del modo de vida normal. Sí, de verdad prefiero evitarlo, aunque siempre tendremos que vivir con ello. Siento que me pierdo, que me vuelco en un estado banal, preocupado más en el fondo por mí que por el resto, y que poco a poco me empiezo a olvidar de “Él”.

La verdad es que no quiero ese estado, definitivamente no. Quiero vivir con Él, quiero estar con Él y quiero servir solo por Él. No pretendo llevar la vida común y tradicional de un cristiano encerrado en las cuatro paredes de un templo porque a veces a Él lo encerramos y lo que realmente debemos hacer es mostrarlo más allá de cualquier muralla o cualquier frontera que pueda existir.

Creo que por lo menos los Cristianos que ya tenemos los suficientes años encima y que ya no somos niños en la Fé, no debemos seguir en ese estado normal. En muchas ocasiones nos sentamos en una banca de brazos cruzados esperando que alguien venga, nos reavive el fuego y nuestra relación con Dios, siendo que el camino a la santificación, son nuestras vivencias, nuestras victorias, nuestros fracasos, nuestras virtudes y defectos. En definitiva, es nuestra historia con Dios.

Y es que también pensamos; “pero es que no lo veo, no lo siento, pero es que tengo mil pecados”, pero nos olvidamos que esa carga ya no es nuestra, sino, la carga de Cristo, la carga que Él soportó en la cruz. “Solo ven y sígueme” fue lo que Él dijo; actúa por Él, vive por Él y apasiónate por Él. Servir, amar al prójimo y por sobretodo amar a Dios, es lo que nos enseñó el Maestro. Él es camino, Él es vida, Él es verdad y acordémonos que no es por vista sino que es por Fé.

Siempre le pido a Dios que este sentimiento perdure en el tiempo, que llegue mi vejez y no me haya olvidado de Él. Que mi complemento de vida sea Él, y definitivamente así no estar en el modo “normal”. Por ahora he probado y quiero más. :)

4 comentarios:

  1. Cooontre!, diste en el punto exacto!, creo que muchos ...yo diría la mayoría, estamos ,y me incluyo, en este estado "normal" que es tan fácil y cómodo, comparto tu opinión, también le pido a Dios que me ayude a permanecer y crecer con Él :) y no se olvide de tomar mi mano todos los días...
    Ves que escribes lindo! :)

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  2. Contre.. perdon por no postear antes.. el texto es largo y quería darme el tiempo... ahora tampoco lo tengo .. quizas despues de q llegue de la igle... pero lo hare confia.
    :)

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  3. Ahora si, perdon la demora.
    Siempre he creído lo que dices, por eso quizás soy participativa.. y esas cosas.. aunque siempre falta.. siempre nos queda grande el molde de Cristo.
    Hoy si bien no dispongo del mismo tiempo que siempre,se que Jesus si ha salido de las 4 paredes.. lo llevo en mi vida. Se q es una etapa y hay cosas en las q necesito avanzar para servirlo mejor.. son solo tiempos.. lo importante es llevarlo siempre..
    Y oye... este sentimiento no debe ser solo eso.. sino una convicción. Cuando sea convicción ten por seguro que no se irá y moverá tu vida (cuando se supone q asi son realmente los cristianos, pero ya ves q no todos lo han descubierto jiji)
    Me alegro que te sientas así , hoy en los días de tu juventud, q es cuando mas fuerza e inspiracion tenemos..Linda reflexion!

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  4. Bárbara: :)

    Gery: gracias!! siempre me das buenos consejos, para poder dar un paso mas adelante.

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